Cuando hablo de Dove me vienen a la mente las mujeres auténticas de sus anuncios, las mujeres de verdad, las que tienen una sonrisa preciosa sin necesidad de una gota de silicona en la cara, las que da igual el peso o la estatura que tengan o si tienen 18 o 70 años. Por esa razón siempre he asociado Dove a la naturalidad, la comodidad y en cierto modo me ha dado confianza, veo a personas de verdad, aunque me consta que esto no deja de ser publicidad de la buena.

Empecé hace mucho tiempo utilizando uno de sus champús y la pastilla de jabón para las manos, más tarde un gel y más recientemente la crema de karité que sabéis que me encanta. Todos estos productos cuentan con el famoso 1/4 de leche hidratante, si, hasta el champú, y los resultados tanto en piel como en cabello me gustan. Pero no hay familias perfectas y creo que les ha salido una oveja negra…

Todas las marcas sacan variantes en sus cremas, sus geles, sus desodorantes… y me apetecía muchísimo probar el desodorante original por el tema de la leche hidratante que contiene y también porque no tiene alcohol, aunque en lo del alcohol es todo tan relativo… mirando en los ingredientes aparece un benzyl alcohol que me hace sospechar de ese punto (para interesados si contiene aluminio). La duración que promete de 24 horas creo que la cumple, aunque depende del calor y de si estamos haciendo mucho ejercicio, pero vaya, que ese punto está bien cubierto, me gusta la sensación de “seguridad” que da porque perdura. Entonces ¿por qué hablo de que todas las familias tienen una oveja negra?

Elegí el formato spray por comodidad, también está disponible en roll-on y es uno de los que utilicé hace muchísimos años, pero en su versión normal dejaba manchas blancas sobre la ropa y me ponía de los nervios. Así que tenía esperanzas de que este en spray me fuera bien… El mayor problema es que cuando pulverizo tiene un olor fuertísimo, no se si a talco o a que, huele a Dove, ese olor particular que tienen los productos de la marca, pero de forma tan intensa que más allá de ser agradable es como si me ahogara. Hasta el punto de que cuando me lo aplico contengo la respiración porque acabo tosiendo si no lo hago, y no exagero.

Aunque tenga la zona de las axilas irritada no me molesta, no escuece, pero si he notado que con el uso prolongado tengo esa zona más seca y termino con picores. Otro punto negativo que añadir 🙁
No recuerdo el precio porque lo compré antes de navidades del año pasado aunque no lo empecé a utilizar hasta mucho más adelante, pero en cualquier supermercado o perfumería lo podéis encontrar.

Resumiendo,
Me da rabia porque la marca me gusta y otros productos me han ido bien, la duración es buena, nos “protege” pero no soporto tener que respirarlo al pulverizar y a largo plazo me reseca las axilas.
Sinceramente, es de esos productos que estoy deseando terminar e intento ser constante. No repetiría en formato spray, quizá en roll on si, aunque en la versión de anti manchas blancas.
De todas formas estoy demasiado “enamorada” de los de Rexona y de momento, cuando termine los que tengo, seré fiel a esa otra marca una temporada.

¿Habéis utilizado este desodorante? ¿Os sucede lo mismo con él o con otra marca?

Gracias por dejar vuestra huella : )