Cuando digo últimos quiero decir de mayo, jajaja, la verdad que tenía tantos esmaltes acumulados por estrenar y bichear que había ido dejando estos, que, asombrosamente, se han convertido en unos de mis esmaltes de verano… pero quizá eso sea otro post extenso de favoritos de verano que quizá suba o quizá no.
Los tonos muy ponibles, nunca puede faltar un rojo potente, es un color que me acompaña durante todo el año aunque quizá ahora en verano busco un rojo más intenso y cuando llega el mal tiempo opto por otros rojos más oscuros que tiran a sangre o con un pequeño subtono granate. También me llamó la atención un morado peculiar y otros tonos pastel… Pero es que fui directa a Kiko con una lista impresionante de todos los que quería y al final me contuve para picar nada más con estos, el de Catrice que veréis al final y otro de crackelar que os enseñaré más adelante.
¿Vamos con los tonos y los swatches?
Marylin se parte de la risa porque sabe que picaré con más…
El rojo es el 240, un tono que se me había antojado desde que en navidades lo probé porque lo tenía mi prima Alicia (un beso guapa!), el morado es el 316, el color que acompaña mis uñas de los pies en el último mes porque me ha dado por ese color y combina con lo que sea. Me las estoy pintando de ese tono una y otra vez.
Siempre que llega la primavera y el verano atacan de nuevo los tonos pastel, uno y otro año, aunque a veces convivan con otras tendencias. Un clasicazo como está siendo el 389, el famosísimo verde menta, al que uní el 359 que es coral anaranjado pastel y el 330 un lila suave. Me gusta combinar distintos colores o en su defecto alegrar con topitos cada manicura. La verdad que rara vez las llevo lisas, y cuando las llevo lisas es porque se trata de un tono espectacular como el que viene a continuación.
El archiconocido clon del Peridot de Chanel pero en su versión low cost, de la mano de Catrice tenemos Genius in the bottle. El tono es impresionante, un dorado verdoso y metalizado que tiene como un punto holográfico dentro del bote y se pierde sobre las uñas.
Los esmaltes de Kiko estabán a 2.50 (aunque ahora algunos están a 1.50 ¡malditos!), su calidad no está nada mal, con una base debajo y el top coat adecuado tienen una duración buena de 3-4 días, aunque a veces incluso más. La pega quizá que algunos tonos si tienden a sacar pompitas cuando hace mucho calor. Los de Catrice sin duda son de mis favoritos, no llevan a los 3.00 € y el pincel es impresionante, cubre de dos pasadas mis uñas canijas y la textura es muy cómoda, con dos capas quedan perfectos aunque incluso con una. La duración es similar de 3-5 días dependiendo de lo que cuidemos las manos.
¿Coincidimos en alguno? ¿Qué tipo de colores preferís en verano?
Gracias por dejar vuestra huella : )