Aunque cuando terminé Sin rastro quedé totalmente saturada porque no era lo que esperaba y dije que pasaría tiempo hasta que volviera a utilizar un champú sólido, no lo cumplí… En parte gracias a Crispi que me comentó por twitter que iba genial para mi problema.
Os recuerdo que mi cuero cabelludo es seco y por eso se descama, que no es lo mismo que tener caspa, puesto que si me da por usar anticaspas el efecto que consigo es resecar más aun el cuero cabelludo, y con ello aumentar la descamación y los picores que pueda tener. Antes utilizaba semana si y semana también el exfoliante capilar de Deliplus pero ahora lo he ido dejando un poco de lado y más o menos lo utilizo una vez al mes. Crispi me comentó que Squeaky Green iba genial para lo que yo buscaba y entonces me animé, y flipé bastante la primera vez que lo utilicé, aunque ahora creo que necesito algo complementario… Vamos al lio.
Creo que los productos de Lush son bastante conocidos por el boom que han tenido así que no hablaré de la marca de forma específica y me centraré en este producto. En esta ocasión Squeaky Green se vende en pastillas, como champú sólido que es, a mi me costó 7.25 €, aunque ahora son 7.60 € (en la web de UK también se puede comprar y sale algo más barato…). Está compuesto de ortiga, romero, árbol de té y menta, lo que nos da una idea de que el aroma es agradable, punto fuerte a la hora de utilizarlo, ya sabéis que Sin rastro huele mal. En su web simplemente nos lo recomiendan para mantener el cuero cabelludo en buenas condiciones.
Como con los sólidos, la forma de aplicarlo es humedecerlo y frotarlo en las manos, la espuma resultante ya la aplicamos en el cuero cabelludo y posteriormente en el pelo. No me gusta frotarlo directamente sobre el pelo porque tiene trozos de hierbas y si no se quedan por ahí enredadas. Después dejo la espuma un rato, uno o dos minutos, no más, y froto con la yema de los dedos de forma enérgica el cuero cabelludo. Pasado ese tiempo aclaro y ya utilizo el acondicionador o la mascarilla que me parezca en ese momento. Señalo que no hago distinciones y que de momento lo mezclo con productos que tienen siliconas porque a mi pelo así le va bien.
¿Qué he efectos he notado? Tras la primera aplicación la descamación menguó. Normalmente me desaparecía parcialmente y no tardaba ni un día en volver y con ella los picores. Ahora tengo más tiempo el cuero cabelludo limpio, con lo que los picores remiten, la descamación cuando aparece es más débil. Cuando utilizo el exfoliante capilar noto aun mayor mejoría. Pero el problema es que necesitaría algo que me hidratara a la vez esta sequedad y la opción es el Snake oil, que espero probar pronto junto con otras cosas (aunque la oferta de enero de Lush ni frío ni calor… esperaba algo como el año pasado). Aunque también acabo de recibir un par de cosas de Apivita que pedí y posiblemente vaya probando con Korres, L’ocittane… no me cansaré hasta encontrar el remedio perfecto porque es incómodo estar así.
Os recuerdo que comprando dos sólidos os regalan una lata (quitando cocomanía y otro que son al corte), que el precio puede parecer elevando pero es que duran muchísimo más que un champú normal y me gusta ese sonido a pelo limpio que obtengo al usarlo.
Resumiendo,
+ Deja el pelo muy limpio, suena.
+ Ha mejorado los picores del cuero cabelludo y la descamación.
– Quizá el precio, pero es que dura meses y meses.
– Pocas tiendas físicas y portes elevados en la web.
– No se quita del todo.
Gracias por dejar vuestra huella : )