La marca nos las presenta como las gomas ideales, aprietan lo justo, ni demasiado ni poco. Es a lo que más miedo tenía, cuando me estilo el pelo la mayoría de gomas se me escurren y tengo que terminar fijando con laca para evitarlo, con las invisibobble no me ha pasadao. No queda un efecto tirante pero aprietan lo suficiente como para que el cabello no se escurra con el paso de las horas y pasemos de una coleta alta a una extraña a media nuca. Puedo darles tantas vueltas como crea oportuno para que la coleta quede sujeta como me gusta.
Aunque cuando apretamos tanto viene el problema que nos decía al principio, lo que más me ha gustado es que tras llevarlas más de ocho horas he notado que evita el dolor de cabeza, o más bien el dolor que se nos queda en el cuero cabelludo, y para mi tan solo con eso ya hace que merezcan la pena.