Escribo estas líneas teniéndolo casi terminado. Podría decir que hago trampa algunas veces porque lo he combinado, algún día, con un antitranspirante si iba a estar muchísimas horas fuera de casa o expuesta a temperaturas más altas, pero más por tranquilidad que por falta de efectividad. Me explico, con un par de pulsaciones la zona de la axila queda cubierta, se seca rápido de manera que no tardamos en podernos vestir tras la ducha y no apreciamos ningún olor durante horas. A veces nos acostumbramos a que la zona de la axila tiene que oler rico a algún desodorante que lleva cierta fragancia, pero la verdad es que lo ideal es que no huela a nada hora tras hora. Señal de que funciona ¿verdad? Pues eso es lo que he pensado durante estos meses. Para el ritmo del día a día me iba bien, a veces reaplicaba si consideraba que así lo necesitaba, pero me ha gustado, no irrita y es efectivo, aunque no sabría decir si aguantaría las temperaturas del verano guardando esa efectividad.
Es un desodorante sin aluminio, entre los ingredientes encontramos que lleva plata coloidal, por ser un antifúngico y tener propiedades antibióticas fuertes, semilla de pomelo, como desinfectante y que ayuda a combatir las bacterias, y un derivado de frutas que es lo que ayuda a que no se formen olores desagradables. Recordemos que vamos a sudar, no se trata de un antitranspirante, pero cuando lo hagamos no se producirá un olor malo y así nos sentiremos cómodos hasta la ducha del día siguiente, de esto tiene la culpa el triethyl citrate. El resto de ingredientes que no os he mencionado son el agua en primera posición y perfume, hacia el final perfume y glicerina. Como veis la composición es muy sencilla y breve.
Scrub corporal scent orange | Green & beauty