A la piel hay que escucharla, sin prisas, con pausa, observando como se comporta en cada estación, con el estrés del día a día a cuestras, con tantos factores… Aunque la mía es grasa durante los meses de frío se vuelve un tanto rebelde y me toca darle unas de cal y otras de arena (la última rutina facial os la dejé por aquí, por si queréis ojear, aunque han cambiado casi todos los productos ya).
Una de las novedades que lanzó Avene a finales de 2017 fue el sérum Hydrance intense, presentándolo como una recarga intensa de agua para la piel, una mejora en la hidratación. Lo dejé reservado para cuando el frío apretara, el hielo comenzara a cubrir los tejados por las mañanas y el vaho escapara de la boca al anochecer. Llevo cosa de dos meses utilizándolo en la rutina de cuidado facial por las mañanas, normalmente me es suficiente por si mismo y prescindo de la hidratante. Hay quien se tira de los pelos porque el sérum sin crema dicen que no hace nada, pero yo noto los efectos y es lo que os voy a contar.
Con la llegada del frío y los cambios de temperatura constantes (calefacción en los sitios en contraste con las temperaturas gélidas) hay ciertas zonas del rostro que se me resentían, la nariz, el borde de los labios, a veces alguna parte de la barbilla, frente o mejillas pedían clemencia, lo que traía consigo sensación de tirantez. Hasta entonces había utilizado una hidratante que me regulaba bastante bien la producción de grasa y encima era natural, pero había llegado el momento de dejarla aparcada.
Así que introduje el sérum Hydrance intense de Avene. Nos encontramos un envase muy higiénico con dispensador, me gusta utilizar tres pulsaciones porque así también abarco la zona del cuello. La textura es ligera y tiene un aroma agradable, floral pero sutil, no carga, proporciona una sensación refrescante sobre la piel dando aspecto de luminosidad y aplacando las zonas con sensación de deshidratación, porque las pieles grasas también se deshidratan y quien diga lo contrario miente.
Con el paso de las horas la piel sigue estando correcta, cuando me maquillo encima no noto que ninguna zona se acartone o brille más de lo que debería, siento suavidad. Tampoco que la piel “escupa” porque le sobre algo e insisto en la importancia de hidratar correctamente para que el aspecto sea el más saludable posible con el paso de los años. No he tenido problemas de granitos con su uso continuado.
No se si será apuntar muy alto, pero creo que podría ponerlo al mismo nivel, o un peldaño más arriba, que el vinoperfect de Caudalie, aunque este segundo está más indicado para luchar contra las manchas solares y el de Avene es más fuerte contrar la deshidratación.
En el punto técnico, este sérum lleva un nuevo componente llamado Cohederm, un trío lipídico que actúa como si colocáramos un film transparente sobre la piel para evitar que pierda humedad, he comprado que así es. Las reservas de agua de la piel se mantienen sin problemas durante toda la jornada, y además, es que el principal ingrediente que aparece en el listado es precisamente su famosa agua termal (muy fan) así que también está indicado para las pieles más sensibles.
Como es de cristal podemos ver la cantidad de producto que queda, contiene 30 ml y tiene un PVP de 30.50 € (on line lo veo hasta por 22.00 €, la diferencia es importante, ojead bien). En mi caso nada más lo puedo utilizar los meses de frío, si algún día hemos tenido temperaturas más altas se me hace excesivo, mi piel no necesita tanto. En cambio creo que puede ser un aliado perfecto para pieles secas, también complementándolo con la crema hidratante rica de esta misma línea (tiene un PVP de 22.68 €).
¿Conocíais este sérum? ¿Utilizáis alguno específico para combatir las bajas temperaturas?
Este producto ha sido enviado por la marca/representante/web para probarlo, hago la reseña de forma libre y totalmente sincera esperando que os sirva.