Aprovechando los rayos de sol, enero de compras.
Me sigue chiflando utilizar prendas con encaje, me siento cómoda sobre todo con el negro, con las puntillas bien llevadas, con las transparencias en su justa medida, aunque no sean lo más indicado para el frío.
Uno de los primeros fines de semana de enero hicimos una escapada para ver la segunda parte del Hobbit, aprovechamos para dar una vuelta por las tiendas aunque no había gran cosa y en ese tipo de ocasiones recurro a prendas más ligeras. Si no el invierno en el norte hace que sigas el modo cebolla, con capas, capas y más capas.
Siendo esta falda negra de encaje de Stradivarius una de mis favoritas me doy cuenta de las pocas veces que os la he mostrado. Tiene distintas capas, cierto vuelo pero que no es excesivo en los días de más aire, algunos bordados con motivos florales y goma floja en la cintura. Cuando se acerca el verano queda perfecta con medias y durante los meses de frío hace lo propio con los leggins.
Camiseta: Bershka
Falda: Stradivarius
Leggins: Mayoral
Botas: Dorking
Abrigo: Desigual
Bolso: Desigual
La camiseta se de quien la encontró no hace mucho rebajada a precio de risa y es todo un partidazo, con cremallera a la espalda. Aprovechando que tiene cuello bajo y redondeado rescaté uno de los collares de Primark para adornar el cuello.
Tanto el abrigo como el bolso tienen su tiempo, ya están algo viejos, son de Desigual y me gustan tanto como el primer día, aunque la calidad del bolso sea algo dudosa. En los labios el intense lipgloss belladona de Illamasqua.
El señor Golfo tenía muchas ganas de jugar, por eso he ordenado las fotos de las últimas a las primeras. Nada más vernos aparecer corrió con la pelota.
¡Ale hop!
A veces es imposible no sonreír y disfrutar de la cara más simple y divertida de la vida, ¿a vosotros no os pasa?